El reporte de la autoridad monetaria evidencia una revisión a la baja del panorama económico para 2025, citando contracción del sector industrial y presiones en exportaciones. 

Banxico publicó un informe trimestral en el que redujo su previsión de crecimiento para 2025 (cifra revisada a la baja) y elevó estimaciones de inflación en el corto plazo, pese a las recientes medidas de política monetaria. El ajuste responde a datos reales de actividad que muestran debilidad en la producción industrial y menor aceleración en el sector exportador. El banco mantiene atentos sus escenarios de riesgo y advierte que la senda de inflación requiere vigilancia; algunos miembros del board discrepan sobre la velocidad de la normalización monetaria. El mensaje combina prudencia y flexibilidad en función de datos entrantes. 

El recorte reduce márgenes de maniobra fiscal y pone presión sobre la agenda económica para impulsar inversión y exportaciones; los mercados podrían percibir mayor incertidumbre si los datos empeoran. Mantener credibilidad anti-inflacionaria será clave para Banxico. 

El país enfrenta un 2025 con crecimiento contenido: enfoque en impulso productivo y control inflacionario será determinante.