La Secretaría de Gobernación aseguró que existen condiciones para “salir” del conflicto tras reuniones con transportistas y campesinos, y anunció la instalación de mesas de trabajo para dar seguimiento a entregables y plazos. 

Voceros de la Segob indicaron que se acordaron puntos sobre apoyos pendientes al campo, seguridad en carreteras y espacios de interlocución para revisar pagos y compromisos. Representantes de transportistas señalaron que se abrió un canal formal de diálogo, mientras que productores menores aún exigían garantías más precisas. El gobierno subrayó que dará transparencia a los acuerdos mediante reportes públicos y comités regionales. No obstante, reportes del 2 de diciembre muestran que algunas movilizaciones se reactivaron por sectores que consideran insuficientes los compromisos. 

El principal desafío es transformar acuerdos políticos en acciones administrativas concretas; la legitimidad del proceso depende de entregables medibles y plazos. El riesgo político para el Ejecutivo aumenta si persisten bloqueos que afecten la economía y cadena logística. 

La eficacia de las mesas técnicas será el indicador para medir si el conflicto pasa del plano discursivo al resolutivo en las próximas jornadas.